Después de la cura de piernas y hombros, nos fuimos al puerto a comer mi "bocadillo de medio metro" con el que he estado soñando todo el día. Posteriormente hicimos una siesta de recuperación de aproximadamente una hora. El problema es que en España en general, antes de las 20:30 horas no se puede cenar. Con el menú del peregrino terminaremos el primer día y mañana nos lleva la segunda etapa a San Sebastián.