Después de unos 10 km nos encontramos frente a un monumento de lo más espectacular, la iglesia de San Martín de Tours en Cigüenza con sus extrañas torres coronadas por pirámides, en medio de un paisaje solitario. Esta es la segunda iglesia. La construcción fue financiada por el Conde natal de aquí, Don Antonio de Tagle Bracho en el siglo XVIII. De niño emigró a Sudamérica con sus padres y fué consejero privado del Virrey del Perú. Se hizo muy rico y quiso hacer algo bueno en su ciudad natal. Encargó esta iglesia, que iba a ser una copia de la Iglesia de los Capuchinos de Lima.
